9ª Sinfonía de Beethoven
Oda a la alegría
Nada mejor para seguir conmemorando nuestro 20 aniversario lírico que presentar la Sinfonía nº 9 o Novena sinfonía de Ludwig van Beethoven.
La Sinfonía n.º 9 en re menor, op. 125, conocida también como «Coral», es la última sinfonía completa del compositor alemán, quien la llevó a cabo entre 1818 y 1824 por encargo de la Sociedad Filarmónica de Londres.
Es una de las obras más trascendentales, importantes y populares de la música y el arte.
Su último movimiento es un final coral sorprendentemente inusual en su época que se ha convertido en símbolo de la libertad. Desde 1985 es el himno de la Unión Europea (UE), en una versión adaptada por Herbert von Karajan.
En 2001, la partitura original de la sinfonía se inscribió en el Registro de la Memoria del Mundo de la Unesco, donde forma parte de la herencia espiritual y patrimonio de la humanidad.
Cuando la obra se estrenó, Beethoven estaba sordo. Cuentan que dirigió la Novena sinfonía valiéndose de su estupenda lectura, aunque cuando el último movimiento acabó, incapaz de escuchar los aplausos del público, tuvo que ser alertado por los músicos de la orquesta para que se diera la vuelta.
Esta, que fue su última aparición pública, fue también el nacimiento de una leyenda: el hombre que cambió la historia de la música había quedado sordo, y estando sordo —esto sí que fue un acto de genialidad—, escribió la Novena sinfonía que constituyó, sin ninguna reserva, una auténtica revolución musical.
Beethoven logra elevar la potencia, la intensidad y la expresividad de los sonidos logrados por el conjunto de la orquesta, hasta alcanzar efectos verdaderamente impactantes en la experiencia auditiva.
Otra importante innovación de Beethoven fue la inclusión de coro y cantantes solistas, que él dispone en el cuarto movimiento, el momento climático de la obra.
El texto elegido por el compositor fue la famosa “Oda a la alegría” de Friedrich Schiller, quien lo escribió en el año 1786.
Con el tiempo, el nombre Himno a la alegría comenzó a ser utilizado para referirse a la obra musicalizada. “Alude a la idea de la fraternidad, que todos los seres humanos se vuelvan hermanos”, “Esa idea muy simple de la solidaridad universal es lo que llega al sentimiento de la gente y son las razones para cantarla e interpretarla”.
Con este gesto, Beethoven dio a la voz la misma dignidad de la que gozaban los instrumentos musicales, es decir, hizo de la voz un instrumento de la orquesta que aportaba nuevas texturas, timbres y efectos a la composición.
Pero también le dio valor a la palabra poética, elevada a la forma de la sinfonía. Ciertamente, la poesía había sido reivindicada en el género de lied alemán mucho antes, pero ahora, hacía su entrada triunfante en la sinfonía que, para entonces, se consideraba la forma más elevada de la música académica.
Elenco
María Martín, soprano
Leticia Vergara, mezzo
Angel Pazos, tenor
José Manuel Díaz.
Coro Luis Mariano
Coro Ametsa
Orquesta Luis Mariano
Dirección Musical – ALDO SALVAGNO